En 2014 cuando se creó la empresa Nostoc Biotech pocos hablaban de microorganismos. Pioneros en su día en el desarrollo de una línea de trabajo que se ha generalizado con los años. Pero los investigadores de Nostoc no se han quedado quietos, han ido evolucionando y mejorando sus métodos de trabajo para seguir siendo innovadores y punteros en su disciplina.
Sus socios fundadores, Enrique Cat y Guillermo Herrero, explicaban en la reciente feria agrícola de Expolevante-Níjar como ha sido la evolución de la empresa con los años.
En 2014 se empezó a trabajar con humus sólido, en 2015 se añadió a la terna el humus líquido y en 2016 empezaron a aislar comunidades de humus de lombriz para dar pie a las primeras especialidades microbiológicas, por ejemplo los bio NPK.
Su proceso de fabricación también ha ido evolucionando. En la actualidad cuenta con una fábrica para humus sólido en Peraleda de la Mata (Cáceres); y con una fábrica para humus líquido en Roquetas de Mar. Ambas inauguradas en 2020.
“El humus que desarrollamos es especial por la tecnología propia que implementa”, explica el CEO de la compañía, Enrique Cat, “extraemos los microorganismos del humus sólido y los llevamos a la fase líquida a través de una técnica de fermentación propia”.
Estrategia recomendada por Nostoc
El humus sólido se aplica manualmente en el momento del trasplante y el líquido vía riego. La recomendación de Nostoc, y la estrategia que están llevando a cabo los agricultores almerienses, es aplicar el humus sólido durante la siembra y a los 40 días aplicar por riego humus líquido en intervalos de 40 días hasta final de ciclo.
“Conseguimos desarrollar raíces, activar la capacidad inmunológica de las plantas, que se hacen más fuertes y reducimos las necesidades de nutrientes”, señala Cat.
Desde hace dos años Nostoc han desarrollado su gama humus plus. Especialidades microbiológicas (micorrizas, bacterias solubilizadoras de NPK, etc) más humus sólido tradicional.
José Antonio Arcos