En un mundo clónico lo singular destaca. Y por la propia dinámica de la imitación, si eres bueno e innovador, serás seguido, ya sea tu marca personal o empresarial. Es la idea motriz que resume la charla impartida este jueves en Roquetas de Mar, en el marco de la Premiere de Rijk Zwaan, por el consultor estratégico Andy Stalman, CEO de TOTEM Branding, uno de los mayores expertos de marca del mundo.
“La búsqueda de lo genuino, de lo auténtico lo mueve todo”, expresaba ante un nutrido grupo de productores y empresas comercializadoras, “si la marca es reputada, en lugar de clientes tendremos creyentes”.
Andy desarrolló su argumentario explicando que pese al ecosistema tecnológico en el que nos movemos será el grado de humanidad el que determine la diferencia entre lo excelso y sublime frente a lo mediocre o anodino. “Todo es marca, todo comunica, ¿qué hago yo que nadie puede hacer? La marca es aquello que nadie puede imitar”, expresaba, “¿cuál es tu historia? La agricultura tiene miles de historias pendientes de ser contadas”.
Un metaverso en el que se puede hacer casi de todo menos comer, siendo la producción de alimentos factor diferenciador; las nuevas tecnologías y redes sociales anhelando a conocer esas historias que hay detrás de un kilo de tomates o de sandías; y los consumidores, ávidos por saber sobre el origen de los alimentos, porque siguiendo su trazabilidad quieren llegar a tu historia.
Es el relato de las cosas. En el particular de las frutas y hortalizas Andy Stalman señalaba que “hay que involucrar al consumidor, que la gente sea parte de nuestras historias agrícolas”.
Ejemplos como el Covid, que despertó – según el consultor – la necesidad de volver a comer más sano; la actual inflación, que cambia hábitos (comprar mejor) y que redescubre el valor de frutas y hortalizas. “Saber quién hay detrás para tener confianza”, añadía.
Son marcas con propósito claro las que resisten al paso del tiempo. “Lo opuesto al amor no es el odio, es la indiferencia”, así que esa búsqueda de la marca tiene que ser concebida como una inversión, no como un gasto.
La charla de Stalman acabó con una simbología muy singular. Levantó a todo el público presente invitándolos a dar abrazos a las personas de las filas vecinas. Abrazos de 6 segundos para hacerlos más auténticos.
Sinergias versus competidores
A continuación, y tras un caluroso aplauso, intervino Ricardo Ortiz, director comercial en España de Rijk Zwaan, que mantuvo una continuidad con el discurso anterior, apelando a conceptos de unidad y de caminar juntos todos los eslabones de un sector que gravita como sureste peninsular desde Málaga hasta Valencia pasando por Granada, Almería y Murcia.
“Colaborar nos hace más fuertes a todos porque de lo contrario no seremos marca, sino mercancía”, describía, “es necesario un lobby fuerte del sector para que se nos respete. Inspirar y colaborar todos juntos”.
Ricardo Ortiz habló de la innovación para ganar valor añadido y no ser un producto de low cost. Sinergias entre empresas y no competencia entre ellas. “Iniciativas conjuntas y no ser lobos solitarios”, finalizaba.
Y emplear las redes sociales como altavoz de un sector unido capaz de proporcionar los mejores alimentos a la sociedad.
Ana Rubio