Se llama Dharma y ya es comercial. Ayer visitábamos en el campo de Níjar una de las primeras plantaciones que ha apostado por esta nueva variedad de calabacín de HM.Clause, la del agricultor Francisco Javier Herrada.
Este productor lleva siete años cultivando calabacín, así que es un buen conocedor de los estragos que puede causar el virus del Nueva Delhi (ToLCNDV). “Por eso este año he querido probar Dharma, que es resistente al virus, y lo que busco es tranquilidad y por supuesto que la variedad mantenga la productividad de Victoria, que es el calabacín que siembro en estas fechas”, comentaba en su finca de Los Nietos este agricultor almeriense.
Francisco Javier apuntaba directamente a la diana, según redundaba a continuación José Miguel Reyes, responsable de marketing de HM.Clause: “El desafío que se ha planteado la empresa es obtener un nuevo calabacín con los mismos estándares de calidad de fruto y productividad de Victoria, sumando más resistencias. Y con Dharma lo hemos conseguido”.
Es evidente que si se obtiene la resistencia y sin embargo falla algún atributo como la calidad de la fruta o los rendimientos, la variedad obtenida no cumple las expectativas. Pero HM.Clause lleva años trabajando precisamente en esto, y con Dharma se ha logrado una nueva variedad, la primera de la casa francesa resistente a Nueva Delhi, que responde a todas las expectativas.
De hecho ayer pudimos comprobar in situ que los primeros cortes de Dharma mejoran la calidad de fruta de otras variedades en esta época del año. Dharma es un calabacín para temprano que desde el inicio aporta frutos rectos, de color oscuro y con brillo.
“Dharma es un calabacín productivo y más precoz porque entra más rápido en producción. Muestra antes las flores”, señalaba la responsable de desarrollo de calabacín de HM.Clause, Beatriz Palmero.
Porte de planta. La variedad es de entrenudo corto, hoja horizontal y más abierta que otras variedades, lo que mejora la ventilación. Beatriz Palmero también describía que por su estructura, más horizontal que vertical, la planta se vuelca un poco menos (más estabilidad) y las lías son más fáciles. “Además habría que resaltar la poscosecha, que es muy buena”, añadía.
Nueva gama “NO-ND”
Se trata de un calabacín desarrollado en Almería, adaptado a las condiciones tanto del campo de Níjar como del Poniente almeriense y en el que su casa obtentora ha depositado grandes expectativas.
Con Dharma se inaugura una nueva gama, llamada “NO-ND”, de futuras variedades resistentes al virus Nueva Delhi. Dharma es el primer calabacín con dicha resistencia, para ciclos tempranos; pero en el futuro vendrán otras variedades para cubrir los segmentos de ciclo medio y tardío. Es más, ya hay un número precomercial que se está testando para trasplantes tardíos, también dentro de la línea “NO-ND”.
Para siembras de agosto
Esta finca de Níjar está trasplantada del 14 de agosto en el invernadero, semilla puesta en el semillero una semana antes. La recomendación para Dharma es el mes de agosto, ya que se comporta muy bien con calor. Un ciclo que concluiría a finales de noviembre o principios de diciembre con la llegada del frío.
En el caso de este agricultor, a mitad de diciembre rotará a un segundo ciclo de calabacín en este invernadero; y en otra finca cercana, también con calabacín, la rotación la hará a sandía.
Nos comentaba, antes de marcharnos, que en esta zona antes el cultivo predominante era el tomate, pero poco a poco el calabacín le ha ido ganando terreno hasta igualarlo en superficie. También empiezan a verse por Los Nietos bancales de pepino.
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Ana Rubio