Tras el gran interés despertado por el proyecto fin de estudios del estudiante de la EFA Campomar, Cristofer Salmerón, sobre el uso de microorganismos de suelo en un cultivo de pimiento (pinchar aquí para leer más), hemos querido conocer otros trabajos fin de grado de los alumnos coincidiendo con las presentaciones hechas esta semana pasada ante el profesorado, con las que daban por concluidos sus estudios en la Escuela Familiar Agraria de Aguadulce.
Entre estos estudiantes, Noemí Ruiz, de Alcolea, que presentaba los resultados de sus ensayos en un cultivo de calabacín al que previamente se le había incorporado los restos de cosecha de un anterior ciclo de lamuyo. Se trata del triturado de pimiento para mejorar las propiedades del suelo, por ejemplo para retener agua o mejorar la oxigenación; pero también para aumentar esos microorganismos beneficiosos de suelo que ayudarán a la nutrición del cultivo.
El ensayo llevado a cabo por Noemí Ruiz se hizo en dos sectores, uno de ellos con la incorporación de la materia orgánica del triturado de pimientos y otro sin ella. En el primero de los casos se concluyó que la plantación había estado más regulada, con una recolección más estable (sin saltos), plantas con un color más verde (menos amarillento que el testigo), un porcentaje menor de frutos de segunda y una mayor calidad de dichos frutos al final del ciclo. En cambio en el sector sin el aporte de materia orgánica, el cultivo fue menos regulado, entrenudos más largos, una subida en la producción más irregular y con más segundas.
“A destacar la calidad de frutos porque si bien los kilos son similares, la diferencia de primeras y segundas en uno y otro sector ha sido grande”, comentaba esta alumna de la EFA Campomar que en la actualidad realiza sus prácticas en el almacén de suministros Francisco Muñoz Flores.
Otros proyectos
Diego Robles, alumno de Vícar, centraba su proyecto fin de estudios en las plagas y enfermedades. Analizaba el ciclo biológico de las plagas, su temperatura ideal, humedad o “los daños directos e indirectos que provocan”, añadía.
Plagas como los pulgones, la rosquilla verde, la araña roja o la mosca blanca. Enfermedades como botrytis o mirando ya al suelo enfermedades y sus patógenos como nematodos, fusarium, verticillium, pythium o rhizoctonia.
Otro de los trabajos era el presentado por Noemí Tarifa, de El Ejido, centrado en la fusión entre hortícolas y ornamentales y en la búsqueda de alternativas a la lobularia (eneldo, albahaca, petunias, etc) como reservorio de auxiliares.
Un proyecto con una perspectiva amplia, ya que Noemí Tarifa profundizó en las asociaciones más beneficiosas desde el punto de vista del aprovechamiento del espacio (por ejemplo, el cultivo simultáneo de tomate con apio o de pimiento con puerro); desde el punto de vista de la atracción de insectos auxiliares, por ejemplo manzanilla con cebolla o romero con zanahoria para evitar ataques de plagas; y desde el punto de vista de repeler plagas.
“Por ejemplo el ajo con la berenjena. El olor del ajo repele insectos plaga como araña, pulgón, trips, etc”, describía Noemí.
Su compañero Torcuato Rodríguez, de Guadix, analizaba pH y Brix en tomate cherry comparándolo con pera, realizando sus ensayos en la finca de experimentación de Unica.
“En cherry he evaluado más de 200 variedades entre cherry redondo y pera, de distintos colores, de rojo a amarillo, y la variedad de amarillo Sugarino de Rijk Zwaan es la que ha dado más grados Brix”, apuntaba Torcuato.
En cuanto al tomate de más calibre, pera, este alumno analizaba 86 variedades. “Es el Caniles el mejor valorado, tanto por consistencia como por azúcares”, añadía.
Por su parte Ramón Rodríguez, de Adra, centraba su proyecto fin de estudios en Campomar en la sandía y en sus diferentes fases: trasplante, floración, polinización, cuajado, engorde, corte o poscosecha, entre otros.
“En sandía la clave es encontrar el equilibrio”, precisaba, “depende mucho del clima, del suelo, de la tipología y del agua. Y una zona como Adra es perfecta para su cultivo porque se dan las condiciones óptimas”.
Bravo por todos ellos.
Ana Rubio