La nutrición se integra en los programas de manejo de plagas y enfermedades

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Nutrición es protección. Y no caminan por separado, sino que van unidas. Así finalizaba su ponencia el experto en fitosanitarios, Joaquín Marcos de León, en las jornadas de Brandt Europe en Murcia celebradas esta semana. El que fuera director general de FMC, CMO de Agrodan y Cheminova impartía una conferencia magistral desde el origen de la protección de plantas en la Antigüedad hasta las corrientes más actuales que unen la alimentación de los cultivos con su farmacia.

Nutrición es protección

“Es el motivo que justifica que las empresas de fitos estén comprando compañías de nutricionales o que abran sus propias divisiones de nutrición”, expresaba Marcos de León, “la integración de la nutrición en los programas de manejo de plagas y enfermedades es hoy día parte clave de la agricultura sostenible porque nutrición es protección”.

Un poco de historia

Bajo el título ‘De los fitosanitarios a la nutrición’ el ponente hacía un barrido por la historia. El uso extensivo de pesticidas químicos sintéticos en el período de la II Guerra Mundial, la revolución verde de los años 50 y 60, los piretroides en la década posterior (1960-70), el desarrollo de los neonicotinoides en los 90 hasta los herbicidas de amplio espectro en el siglo XXI.

Tras rescatar el relato histórico de la hemeroteca, Joaquín Marcos de León se detuvo en el presente, escenario reconocido por las resistencias a pesticidas, la necesaria búsqueda de productos de alta eficacia y bajas dosis y el engranaje del manejo integrado de plagas (IPM), donde los biopesticidas – derivados de organismos naturales – y el control biológico son una pata fundamental.

Presente

“Todo lo anterior hay que entenderlo en el contexto del Pacto Verde, de la estrategia europea ‘De la granja a la mesa’, que ahora se ha retrasado; pero que ponía en el horizonte de 2050 una reducción del 50% de los fitosanitarios y del 30% de los fertilizantes”, recordaba Joaquín.

Un momento presente en el que se buscan nuevas soluciones, ya sea la búsqueda de extractos de plantas para el control de plagas o la búsqueda de dichas herramientas entre los microorganismos, entre otros ejemplos.

Cosechas que se reducen en un 40% por cuestiones de estrés (tanto abiótico como biótico), diferentes problemáticas derivadas del exceso de nitrógeno o las recientes políticas medioambientalistas frente a los nitratos… un escenario que ha llevado a una reconfiguración de planteamientos como comprender que el potasio y el calcio puedan jugar roles en el cuidado de las plantas. Porque volvemos a la premisa del inicio: nutrición es protección.

Entender estas ideas va más allá de la agricultura porque la historia de la humanidad, tanto las hambrunas como los movimientos migratorios han estado marcados muchas veces por las enfermedades de los cultivos. Basta recordar la hambruna china entre 1959-1961 en la que se calcula que murieron de inanición entre 15 y 35 millones de personas. La cifra exacta no se conoce con precisión, dado el hermetismo y la escasa transparencia de las estadísticas chinas.