Melones enanos, tipo cherry y con piel comestible. Ése es el proyecto que pretende desarrollar la compañía agroecológica Superfruiter en España, en lo que supondrá su desembarco en Europa.
Y, para ello, invertirá cinco millones de euros, bajo la esperanza de hacerse con un mercado potencial, el tercero del mundo, el español, valorado en más de 50 millones anuales. Así lo avanzan fuentes de la compañía. En todo el mundo se cultivan más de 1,3 Millones de hectáreas de melón, lo que supone alrededor de 5 billones de dólares a nivel global.
El mercado nacional de producción de melones en España tuvo una caída considerable el año pasado, perdiendo un 66% de cuota. Por eso España ha pasado a la tercera posición a nivel global.
Superfruiter es una empresa especializada en selección genómica, técnica con la que ha creado el “gen superfruiter” que ahora pretenden aplicar a la creación de dos novedosos tipos de melones: unos, que pesen menos de 800 gramos, y otros, de tamaño cherry y de piel comestible, similares a los exitosos tomates cherry. Todo ello, según las mismas fuentes, se hará gracias al llamado Gen Superfruiter, como la compañía denomina a su proceso patentado de selección genética con la que desarrollará frutas de tamaño enano.
Para su implantación productiva en España está siendo asesorada por la firma de banca de inversión Eureka Corp., con el que también colabora en la configuración de su pull de inversión y su red de colaboradores. Y, para el desarrollo de sus melones mini, por el Instituto Volcani de Investigación Agrícola, ubicado en Beit Dagan (Israel) y cofinanciado por el Gobierno del país.
El equipo de Superfruiter está dirigido por la experimentada Yael Alter, CEO de la compañía y profesional con una amplísima experiencia en la consolidación de startups israelíes disruptivas dentro del ámbito alimentario, o los doctores Moshe Bar y Yaakov Tadmor expertos en producción de semillas y selección genómica respectivamente. La compañía cuenta con el soporte financiero de la firma de venture capital israelí Copia, dirigida por el inversor Ohad Zuckerman, experimentado emprendedor que hizo fortuna en el sector de la producción de semillas y que lidera una de las firmas de capital riesgo más dinámicas en el sector agrotecnológico israelí.
La documentación interna de Superfruiter subraya que la creación de fruta «con nuevas formas y sabores» incide en la «generación de menos desperdicios» y se adecúa a las nuevas formas de consumo (por ejemplo, núcleos familiares más pequeños o la posibilidad de comer grandes frutas en formato snack).
Asimismo, cifra en un 30% la reducción de uso de agua y fertilizantes en las plantaciones. La fase final de este proyecto será, en efecto, la creación de un minimelón de color amarillo, de piel «suave» y comestible sin semillas en su interior. «Se podrá consumir como un tomate cherry«, recalca la documentación de la compañía a la que este medio ha tenido acceso.
“Todo ello se hace esencial en un mercado como el de la producción agrícola en España, muy necesitado de tecnologías que conecten con las nuevas formas de consumo, impulsen la sostenibilidad de los cultivos y permitan llevar a los mercados productos innovadores, que sorprendan al cliente”, citan fuentes de Eureka Corp.
En el caso de los melones amarillos —el modelo que Superfruiter quiere adaptarlos al formato mini—, una misma planta suele producir en torno a unas cuatro piezas de fruta, de un peso de, aproximadamente, 1,2 kilos.
La compañía israelí calcula que, al seleccionarlas genéticamente para que produzcan melones más pequeños, podrán producir hasta diez unidades por planta, de un peso de sólo medio kilo.
Superfruiter está comenzando los primeros ensayos en España en este 2024, concretamente en la zona de Almería y Murcia, aunque también está en conversaciones con compañías del sector hortofrutícola de otras regiones como Extremadura o Castilla La Mancha. También está trabajando, en coordinación con el equipo de Eureka Corp., en la apertura de relaciones con cadenas de supermercados en Europa y Reino Unido, así como algunos chefs de reconocido prestigio. Los nuevos formatos de melón propuestos por Superfruiter permiten la realización de maridajes totalmente disruptivos, muy en la línea de las tendencias de la alta cocina actual. En 2025 la compañía prevé consolidar la penetración del producto en el mercado global desde España, incluso abriéndose a sublicencias sobre sus semillas y alcanzando una facturación de 100 millones de euros antes de finales de 2030.
Fuentes de Eureka Corp. confirman que varios inversores institucionales y compañías del ámbito industrial han corroborado su interés en participar en el capital de Superfruiter, en una ronda que será de entre 4 y 9 millones de euros en una primera fase.
José Antonio Arcos