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La papaya es un cultivo tropical, adaptado a Almería, del que hemos publicado desde el inicio de este blog hace ya más de diez años. Artículos anteriores siempre desde la óptica de la producción, a pie de campo, pero nunca dentro de un almacén. Hasta ahora. La cooperativa Hortamar es la primera en Almería en instalar una línea de confección de papayas. Hemos ido a conocer esta infraestructura en el momento más interesante de la campaña, entre mayo y junio.

Tratamiento poscosecha y calibrado
Amparo Rodríguez, responsable de la línea de papaya, y el presidente, José Miguel López Cara, nos atienden para describirnos todo el proceso desde que la papaya llega del invernadero, recibe un tratamiento de encerado o recubrimiento para alargar su vida útil poscosecha, pasa por un túnel de secado y entra en una línea de calibrado.
Posteriormente las cajas ya confeccionadas que observamos en las imágenes. Las hay de muy diferentes calibres, según nos indica Amparo, que nos explica que los calibres más habituales son el calibre 3 (papayas de 1,1 a 1,5 kilos) y el calibre 4 (piezas de 800 a 1,1 kilos).
Los dos anteriores son los más comerciales, pero hay más, incluso más pequeños como el calibre 6 (600-700 gramos) que es el que demanda un mercado como el de Italia.
Mercados
Precisamente hablando de mercados hay que pensar en la exportación, que es donde se encuentra hoy día el principal consumo de esta fruta tropical, que por sus demandas de radiación, calor y humedad se adapta al cultivo en invernadero en el sureste peninsular.
Alemania es el principal receptor de las papayas de Hortamar, que se envían con la marca Bouquet que es quien las comercializa a través de Anecoop. Hortamar es miembro desde hace años de esta cooperativa española de segundo grado.
También hay mercado en Europa del Este, en países como República Checa.
Variedades de papaya
José Miguel y Amparo nos hablan de distintas variedades con las que trabajan los agricultores de papaya de Anecoop, que confeccionan todo su producto en esta línea de Hortamar. Variedades como Intenzza, quizá la más extendida, o Sweet Sense, que hace un calibre más pequeño y que destaca por un sabor muy dulce. Ambas variedades pertenecen a la casa mexicana Semillas del Caribe.
Otra variedad con la que se trabaja es Caballero, de la casa española CapGen Seeds. Pero la cooperativa va más allá y en su finca de investigación UAL-Anecoop ensaya decenas de otras variedades susceptibles en el futuro de cultivarse bajo abrigo.
Del pepino a la papaya
Por otro lado, conversamos con el hermano del presidente y también socio de Hortamar, Emilio López, que ha cambiado la mitad de su superficie de hortícolas por papayas. Cultiva dos hectáreas en Tierras de Almería.
“Estoy contento con la papaya. Se adapta bien, es un cultivo más tranquilo que una hortaliza y me exige menos mano de obra”, explica Emilio.
Le preguntamos a este productor almeriense por los rendimientos. Nos comenta que el primer año se pueden sacar entre 11 y 14 kilos, que el segundo año la producción es menor, unos 9 kilos, “pero con menos costes de producción porque el árbol está ya hecho”. Emilio ha sacado una tercera barriga para este año y pronostica que alcanzará “los 10 kilos y con muy buena calidad”.
Lo habitual, la vida útil en el ciclo de una papaya en Almería está en dos barrigas, pero cada maestro tiene su librillo y Emilio ya por tres barrigas, tercer año.
Precios
Los números con la papaya salen. La liquidación media al agricultor supera el euro, incluso puede llegar a 1,2. “Producimos al año un millón de kilos, por encima a veces. Y tenemos mercado y demanda de clientes en Europa para duplicar estos volúmenes”, expresa el presidente en alusión al margen de crecimiento que puede contemplar esta sección de tropicales de Hortamar.
Con el frío el cultivo de papaya se regula. Las primeras recolecciones empiezan en febrero y marzo, en pequeñas cantidades, y se concentran en los meses de abril, mayo y junio, y en menor medida en julio.
“El punto álgido de la papaya es junio”, señala José Miguel López. “Pero no es nuestra única fruta tropical, el año pasado comenzamos con pitahaya, cuya cosecha se concentra de agosto a noviembre”, añade.
Los productores de papaya de Hortamar se ubican entre El Ejido y Roquetas de Mar, en el Poniente de Almería.