El grupo UPL ha creado una nueva división llamada NPP, traducida al español como Protección Vegetal Natural. Su presentación en España tenía lugar este pasado jueves en la localidad sevillana de Adriano con una destacada presencia de medios nacionales e internacionales, incluida la asistencia del embajador de India, ya que se trata de una multinacional hindú con presencia en 138 países y una facturación anual de 5.200 millones de dólares.
Durante la rueda de prensa los responsables de la compañía esbozaron el concepto del micro y su efecto sobre el macro. Herramientas micro – como bacterias, hongos, algas, extractos de plantas, etc – capaces de crear un impacto macro en el mundo para restaurar la producción alimentaria.
“Es verdaderamente apasionante”, comentaba Carlos Pellicer, Global Chief Operating Officer, “el poder del micro, de la vida de lo pequeño, con el impacto macro”.
A continuación Carlos Pellicer hacía un gran anuncio en el marco de la creación de la nueva división NPP y a su vez la colaboración de la Fundación FIFA: “Nos hemos marcado como reto rescatar una gigatonelada de carbono de la atmósfera en los próximos 19 años”.
En ese propósito el papel del productor será fundamental. De ahí el acuerdo con la Fundación FIFA, “ya que para los agricultores muchas veces los futbolistas son héroes; pero en este caso serán los productores los verdaderos héroes que capturen carbono”, añadía Pellicer para quien el secuestro de CO2 se ha convertido en una apuesta estratégica y diferencial de UPL.
Por su parte Natalie Hummel, Head NPP Research Platforms & NAT, describía que para cumplir tal objetivo la multinacional cuenta con importantes argumentos, ya sean sus estaciones de I+D+i ubicadas en distintas latitudes (Latinoamérica, India o España, entre otros países) o sus plataformas de investigación que abordan desde los extractos de algas y plantas pasando por el orden microbiano hasta el control de plagas, entre otras áreas de conocimiento integradas por equipos multidisciplinares de técnicos y científicos.
“Creamos nuevas soluciones sacadas de la propia naturaleza para lograr producir alimentos seguros y sostenibles”, subrayaba Natalie Hummel.
Es un reimaginar la sostenibilidad cambiando las reglas de juego con el condimento de la resilencia. Pero obstáculos en el camino hay, como el actual marco regulatorio según países y continentes.
A preguntas de los periodistas Fabio Torretta, Chief Operating Officer NPP, explicó que el marco regulatorio europeo lleva a que sea en países fuera de Europa donde antes se registren los productos más innovadores y sostenibles. Puso como ejemplo Brasil, donde antes se requerían 5 años, pero ahora solo es necesario 1 año desde que se hace la solicitud de registro hasta que entra en el mercado. En cambio en la europea Portugal son 7 años.
Fabio Torretta trazó el camino propuesto por UPL “para poner en el centro la sostenibilidad respetando la biodiversidad. Además tenemos la oportunidad de convertir la agricultura en un actor principal frente al cambio climático y eliminar grandes cantidades de CO2 del aire”.
Protección de cultivos, mejora de la salud de los suelos, desarrollo de la resilencia de las plantas, aumento de los rendimientos o restauración del equilibrio con el medio ambiente son algunas de las paradas en ese camino abanderado por esa nueva división NPP (Protección Vegetal Natural).
Durante la presentación a medios se pusieron algunos ejemplos, entre ellos el condicionador de suelo Zeba capaz de reducir las necesidades de agua entre el 25-30%. “Retiene agua, abre el suelo y mejora su oxigenación para que haya vida. Conectar esta tecnología con otros organismos es una labor bella que nos inspira”, describía con entusiasmo Carlos Pellicer.
Mayor rendimiento, menor impacto
Es uno de los mensajes reiterados por los responsables de UPL, “mayor rendimiento, menor impacto”. Y este mensaje pasa por innovar en mejora del uso del agua y de los nutrientes para eliminar contaminación por lixiviados, aminorar el estrés de las plantas, aumentar la cantidad de materia orgánica en el suelo o implementar la tecnología para retener carbono.
Las anteriores son algunas de las líneas de trabajo de esta empresa de biotecnología que en la actualidad tiene más de 139 autorizaciones y 64 solicitudes en fase de registro. Desde bioestimulantes hasta el biocontrol pasando por un cajón muy amplio de biosoluciones UPL y su nueva división NPP trabajan para dar respuesta a las actuales y futuras demandas de productos sostenibles.
Ana Rubio
Muy interesante y necesario. Enhorabuena!!