Entrevista Francisco del Águila López, fundador de Viagro
Conversamos con el fundador de una compañía almeriense que durante el presente 2020 conmemora su 40 aniversario. Francisco del Águila López nos cuenta cómo Viagro ha crecido siempre a la par del sector, adaptándose a los cambios e incorporando todo tipo de innovaciones para apuntalar el futuro.
PREGUNTA.- Usted es hijo de la vega de Almería…
RESPUESTA.- Así es. Nacido en el campo en un cortijo que estaba donde hoy día se ubica la depuradora de la capital.
P.- El amor al terruño lo debe llevar en la sangre, ¿no?
R.- Sí, desde siempre. De pequeño ya ayudaba a mi padre que cultivaba cereales (maíz, trigo), berza, patatas y tomates, todos cultivos de calle en la vega de Almería. Lo hacía con devoción. Y después con los años llegó la primera tienda, en la Cruz de Martos, donde empezamos a vender los primeros fitosanitarios.
P.- A esa primera tienda le sucedió después la apertura en La Cañada, naciendo así Viagro. ¡40 años ahora!
R.- Cuatro décadas de trabajo y esfuerzo.
P.- ¿Es esa la clave para mantenerse en el tiempo? ¿Trabajo y esfuerzo?
R.- Es una de ellas, y muy importante; pero hay otras. Hay que tener una visión en el mañana y no distraerse. También hay que mantener una inquietud por mejorar, no quedarse estancados nunca.
P.- En ese sentido, ustedes han ido evolucionando durante estas cuatro décadas. Una evolución constante…
R.- Efectivamente. De hecho en 40 años Viagro ha pasado de ser un almacén de suministros a una empresa de I+D con laboratorios propios, fábrica de abonos líquidos y planta de envasado, con programas de investigación con diferentes Universidades y siendo homologada como Empresa Oficial de Ensayos Fitosanitarios.
P.- Lo que usted describe va mucho más allá de lo que supone la venta de fitosanitarios o abonos, propias de los almacenes de insumos, ¿por qué esa inquietud de no ser conformistas?
R.- Ahora está de moda la palabra innovación, pero en Viagro la llevamos poniendo en práctica desde hace muchos años. Recuerdo cuando viajaba a las ferias internacionales, por ejemplo a las de Holanda y me fijaba en todas las novedades que se pudieran adaptar a nuestro modelo de agricultura protegida. La manta térmica es un ejemplo. Así que en Viagro siempre hemos querido crecer, evolucionar y aportar valor al sector. No quedarnos solo en lo que se hacía al principio.
P.- En esa hemeroteca del tiempo, ¿fueron ustedes también pioneros en la incorporación de técnicos de campo en Almería?
R.- Fuimos de los primeros, sí, allá por los años 80. Entendimos que era muy importante poder dar un servicio de asesoramiento al campo con técnicos. Y desde entonces hasta hoy día continuamos con esta tarea.
P.- Esa I+D que es seña de identidad de Viagro, ¿en qué se traduce?
R.- En el desarrollo de productos propios de alto valor, tanto en nutricional como en protección vegetal. Fuimos hace unos 25 años de las primeras empresas almerienses en construir una fábrica de abonos líquidos, laboratorio propio y un equipo de investigación. Este equipo desde sus inicios fue el responsable del desarrollo de las soluciones nutritivas, que tienen como prioridad mejorar rendimientos y eficiencia ecológica. Uno de los productos ejemplo de esta labor de investigación es el ORION-VIA, complejo natural que evita lixiviados y facilita la absorción de nutrientes por parte de la planta, mejorando y oxigenando el suelo tanto para cultivo convencional como ecológico.
Posteriormente se ampliaron los laboratorios, para el manejo e investigación de insumos aplicados a ecológico, cuidando y potenciando la microbiología benéfica. Como complemento a toda esta base tecnológica se obtuvo la acreditación EOR (Empresa Oficial de Ensayos Fitosanitarios), de esta forma testamos los productos propios y de otras compañías con la máxima rigurosidad. Son muy importantes estos ensayos porque comprobamos la eficacia de las diferentes soluciones, buscamos sinergias y analizamos los problemas que puedan surgir según los distintos estadios fenológicos.
P.- Comenta que además trabajan productos en distribución…
R.- Sí. Combinamos ambos modelos, trabajamos como distribuidores de las principales marcas del mercado y a su vez disponemos de nuestros propios desarrollos en un catálogo muy completo de soluciones para el campo.
P.- Y lo hacen en los principales puntos cardinales de la agricultura protegida almeriense, desde Poniente a Levante.
R.- Nuestra central está en La Cañada, y luego tenemos centros en el Polígono de La Redonda en El Ejido, donde cubrimos todo el Poniente almeriense; y también en Níjar para cubrir esa otra zona de la provincia. Pero además desde hace unos años disponemos de personal en las provincias de Sevilla y Huelva.
P.- Todo esto lo ha conseguido Viagro siendo modelo familiar, ¿cierto?
R.- Muy cierto. Somos empresa familiar. Siempre lo hemos sido. Y tengo que decir que me siento muy afortunado de que mis hijos, tanto María del Mar como Francisco Javier, hayan sido el mejor de los relevos generacionales posibles. Con ellos el futuro está garantizado. Hay Viagro para muchos años.
José Antonio Arcos