Catorce asociaciones de carácter local, pertenecientes a diferentes regiones (Comunidad Valenciana, región de Murcia, Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Castilla y León) han organizado esta semana, miércoles en algunas provincias y jueves en otras, diferentes actos de protesta para – en la medida de lo posible – dar un toque de atención sobre la vertiginosa situación de desamparo en la que vive instaurado el sector primario español.
El seguimiento ha sido en algunos casos simbólico y en otros más numeroso, sobre todo en las asociaciones pertenecientes a la Comunidad Valenciana; en cualquier caso ha sido escaso y minoritario teniendo en cuenta la dimensión de la agricultura y la ganadería en España, actividad de la que dependen miles de familias.
Según Pepe Montagut, presidente de la asociación de agricultores de Nules, “hay que mover las estructuras agrarias que están anquilosadas en España, anquilosadas en los despachos donde se vive del agricultor pero no para el agricultor”.
Las catorce asociaciones convocantes tienen prevista una próxima reunión a lo largo del mes de octubre para constituir un foro rural, de ámbito nacional, para vertebrar y organizar este movimiento de asociaciones locales que representan a pequeños y medianos agricultores y ganaderos.
Recuperar el principio de “preferencia comunitaria”
En los primeros tratados de la actual Unión Europea existía como principio fundacional el de “preferencia comunitaria”, que venía a significar que Europa debía siempre primar a las producciones de los países miembros y abrir las puertas a las de países extracomunitarios solo cuando no hubiese producción europea. Este principio, básico en la creación de los cimientos de lo que hoy día conocemos como Unión Europea, se eliminó del registró normativo comunitario; aunque esta cuestión, tan vital para el futuro del agricultor europeo, apenas ha trascendido a la opinión pública.
Una de las medidas que promueven estas asociaciones de carácter local es recuperar aquel principio tan fundamental para poder competir con terceros países. “Hay que poner aranceles, primero vender nuestros productos y después los de esos otros terceros países”, explica Pepe Montagut. “Hay que recuperar la preferencia comunitaria”, añade.
Ana Rubio