Esta campaña el agricultor almeriense está sufriendo una incidencia de Trips parvispinus como ningún año atrás. Hemos conocido esta semana en el Poniente almeriense algunos productores que nos han contado que huyendo de esta plaga se han animado a probar el cultivo del melón piel de sapo para cosechar a principios de noviembre.
Es la contraestación al melón de ultramar. Hay una ventana que es la que se quiere cubrir con este ciclo antes de que llegue Brasil y Centroamérica. Plantaciones en invernadero en Almería en pleno agosto y recolección en noviembre.
La experiencia de los dos últimos años ha sido irregular en precios, dependiendo mucho de la semana de corte y de la demanda en ese momento. Una lotería, como suele ocurrir con el melón, pero este año han sido más los productores que han preferido arriesgarse a tener que enfrentarse al Parvispinus.
Al igual que en el Poniente también hay agricultores con melón de otoño en el campo de Níjar. La diferencia está en que el melón en Níjar entra más en noviembre, su recolección es un poco más tarde que la que pueda haber en zonas del Poniente como El Ejido o Adra. En cualquier caso, mucha suerte a todos estos agricultores valientes.






