Doble jornada sobre el papel de ‘La mujer en el cooperativismo’, que arrancaba ayer y que se cerrará esta tarde en la sede de CASI en Los Partidores (La Cañada, Almería). En las ponencias de la primera jornada se puso de relieve el largo camino aún pendiente para hacer visible el papel de la mujer agricultora, pilar y motor imprescindible en un modelo agrícola como el almeriense que ha cristalizado durante medio siglo gracias al carácter familiar de las explotaciones agrícolas.
En la primera charla, Noemí Algarra, técnico de Aproa presentó los resultados del Proyecto Integra, un estudio elaborado por el Ministerio de Servicios Sociales e Igualdad que refleja la baja participación de la mujer en la vida asamblearia de las cooperativas y en sus órganos de gobierno.
A nivel nacional y andaluz el porcentaje de socias en las cooperativas es del 25%, porcentaje que disminuye aún más en la provincia de Almería, donde apenas el 14% de los asociados en cooperativas son mujeres. En Andalucía solo Cádiz tiene cifras aún más bajas.
Si se analiza la composición de los órganos rectores, las cifras que aporta el estudio son a nivel nacional, pero son igualmente reveladoras, ya que de los asociados de cooperativas que participan en los consejos rectores de las mismas apenas el 3,5% son mujeres.
Noemí Algarra animó a las agricultoras a participar más activamente en el mundo cooperativo, asistiendo a jornadas, a Asambleas, etc, para poder así tener mayor visibilidad en los órganos de gobierno, es decir, en las rectoras.
Titularidad compartida en las explotaciones
La siguiente en intervenir fue Dolores Guillén, técnico del departamento de ayudas de Coexphal, que presentó la ponencia ‘Titularidad compartida en las explotaciones: acceso de la mujer a la gestión de las explotaciones en condiciones de igualdad. Nueva instalación y modernización de explotaciones agrícolas’.
Dolores Guillén describió que existe un registro de ‘Titularidad compartida’, impulsado desde hace unos años por el Ministerio de Agricultura (Magrama), pero que apenas se está utilizando, entre otros motivos por su desconocimiento. De ahí la importancia de este tipo de jornadas que sirven para dar a conocer los nuevos instrumentos existentes que contribuyen a la igualdad en el campo.
Guillén explicó que la inscripción en este registro permite pedir subvenciones para la explotación agrícola, sobre todo en las ayudas de concurrencia competitiva, ya que esas fincas tienen prioridad en los baremos que determinan la obtención de subvenciones. Por ejemplo, para las ayudas de modernización son explotaciones prioritarias.
En este sentido, Inmaculada Idañez, responsable del Área de Igualdad de Coag y presidenta de Ceres, añadió que en España a día de hoy se han contabilizado 187 altas en este registro creado por el Ministerio hace más de cinco años. En Andalucía no hay ninguna mujer que se haya inscrito en él, aunque en Almería se está tramitando el primero. Las cifras hablan por sí solas.
Segunda jornada. Jueves 29
Esta tarde se desarrolla desde las 17,30 la segunda de las jornadas, de entrada libre para los interesados. Se inicia con la charla de Ana Martín Papis, secretaria del consejo rector de CASI, que abordará el funcionamiento de los órganos de gobierno de las cooperativas relatando su experiencia en primera persona. A continuación la agricultora ejidense Lola Gómez Ferrón tratará el papel de la mujer en la agricultura almeriense (pasado, presente y futuro); mientras que Rocío Rentero, coaching, abordará el liderazgo femenino. Las jornadas acabarán con una mesa redonda.