Bajo el lema ‘Conectando contigo’, la multinacional muestra estos días su amplia gama de variedades de tomate con resistencia al virus del rugoso y sus soluciones de protección de cultivos.
La compañía cuenta con más de 40 variedades en ocho tipologías diferentes, que conforman un amplio portfolio que sigue creciendo.
En protección de cultivos, apuestan por el manejo integrado de plagas y enfermedades, combinando innovación y soluciones sostenibles para lograr la rentabilidad del productor.
BASF | Nunhems participa desde el 24 al 26 de abril en la 16ª Expolevante Níjar (Almería) en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Campohermoso. Bajo el lema ‘Conectando contigo’, la multinacional muestra todas sus soluciones para los cultivos hortícolas del Levante almeriense y, en especial, su ‘estrella’, el tomate.
De este modo, durante tres días, pone el foco tanto en sus nuevas propuestas fruto de la genética, como es el caso de su gama de variedades de tomate con resistencia al virus del rugoso (ToBRFV), como en sus herramientas de protección de cultivos para combatir plagas y enfermedades.
“Nuestra apuesta en tomate se sustenta en tres grandes pilares: la producción que el agricultor espera, con la calidad que necesita y la resistencia que le permita dar cumplimiento a los dos anteriores”, explica Miguel Espinosa, Area Sales Manager de Almería en BASF.
Para ello, la compañía cuenta ya con más de 40 variedades en fase comercial y pre-comercial en ocho tipologías diferentes, que conforman un amplio portfolio que sigue creciendo, entre ellas el tomate pera, con Azovian; el rama, con Cabosur, ‘estrella revelación’ en esta campaña; o el cherry Daivion. Pero también rosas, materiales para ‘high tech’…
“Estamos en las tipologías mayoritarias”, apunta Espinosa, quien avanza que, ni mucho menos, quieren quedarse ahí: “Nuestro objetivo es seguir desarrollando variedades en el resto de segmentos del cherry y en otros tipos como el suelto, e incluso, en especialidades como nuestro tomate Intense, entre otras”.
Todas estas nuevas variedades de BASF | Nunhems cuentan con resistencia al virus del rugoso, fruto del esfuerzo investigador y de innovación de la compañía, y lo que es más importante: resultado de su “testeo en campo y bajo condiciones de presión de virus en fincas tanto propias como de agricultores colaboradores y clientes”.
“Hemos demostrado que nuestras variedades funcionan agronómicamente y, además, cuentan con resistencia para que el productor consiga una producción sana y de calidad durante todo el ciclo”, insiste Espinosa.
Soluciones de protección de cultivos
Junto a la genética, la multinacional también muestra durante el evento sus soluciones para la protección de cultivos, resultado de su apuesta por la “innovación y la sostenibilidad como base para lograr la rentabilidad para el productor”, comenta por su parte José Ferre, Crop Manager de Hortícolas de BASF.
De este modo, la compañía se alinea con las exigencias del mercado, que demanda productos más saludables y con un menor impacto medioambiental durante su cultivo. Y lo hace con la combinación de herramientas insecticidas y fungicidas provenientes de la química tradicional y también la resultante de la última tecnología aplicada al sector.
“Apostamos por el manejo integrado de plagas y enfermedades, por un modelo de protección de cultivos equilibrado, que conjugue programas de tratamiento convencionales con soluciones biológicas”, explica Ferre.
Entre estas últimas, destacan, por ejemplo, el bioinsecticida Velifer, para el control de mosca blanca y trips, que ha demostrado, además, “una buena eficacia contra el trips parvispinus”. O el biofungicida de amplio espectro Serifel.
“Desde BASF abogamos por un nuevo modelo productivo”, insiste Ferre y, para ello, “queremos convertirnos en un partner sólido y proveedor de soluciones globales para toda la cadena de valor”.