Aplicado en manzanos, al inicio de la caída de los pétalos de las flores centrales, el producto de Greenhas optimiza la acción de los aclarantes sintéticos con importantes ventajas en términos de rendimiento y costes.
El raleo del manzano es una de las prácticas agronómicas más delicadas y al mismo tiempo estratégicas. Después de un aclareo correcto, es posible apreciar producciones de mayor calidad, tanto en tamaño como en color. Además, al realizar un raleo habitual de la cosecha de forma óptima, se minimizan las alternancias productivas, estabilizando los rendimientos.
El raleo manual tradicional, con los frutos ahora formados, tiene costes que parecen difíciles de sostener en los escenarios frutícolas actuales. De hecho, se pueden necesitar de 200 a 300 horas de trabajo y, en general, para los presupuestos de la empresa la mano de obra supone el principal coste de explotación. Incluso el aclareo mecánico encuentra límites precisos en cuanto a la posición de las parcelas y el sistema de cultivo de las plantas. Por estas razones, se han establecido a lo largo del tiempo agentes de raleo sintético, capaces con una aplicación de seleccionar solo los frutos a conservar, es decir, los desarrollados a partir de la flor central del racimo floral.
Fácil decirlo, menos fácil hacerlo. De hecho, muchas condiciones climáticas influyen en la práctica del raleo, como la temperatura, la humedad y la exposición a la luz. Del mismo modo, variedades como Fuji y Gala son más difíciles de ralear que otras. Por lo tanto, los resultados en el campo pueden variar según la elección racional tanto de los productos como del momento adecuado de uso.
Los diferentes momentos de uso de los raleadores
Conceptualmente, los raleadores químicos se pueden dividir en dos macro categorías, es decir, la que incluye los raleadores florales y la de los raleadores posflorales. Entre los primeros se encuentran, por ejemplo, el tiosulfato de amonio, un fertilizante, pero también el etefón, un éster fosfórico.
En el raleo post-floral, en cambio, existen 6-Benziladenina, NAD (1-naftilacetamida) y NAA (ácido alfa-naftalenoacético). A estos se ha agregado más recientemente metamitron, originalmente un herbicida para la remolacha azucarera.
El papel del etileno en el raleo floral
El momento óptimo para las intervenciones sobre las flores coincide con el inicio de la caída de los pétalos de la flor central. En esta fase, la aplicación de tiosulfato de amonio induce la producción de etileno, debido a la breve interrupción del desarrollo foliar, la fotosíntesis y la reducción del transporte de fitohormonas como las auxinas.
Durante la floración de las flores secundarias, el etileno estimula el envejecimiento de los óvulos provocando la caída de las flores no fecundadas o que han sufrido una fecundación anómala. La reducción del número de semillas en manzanas y la inhibición del flujo hormonal hacia los frutos también favorecerá la acción del raleador sintético distribuido.
Hascon S57: la propuesta de Greenhas Group, negro sobre blanco
La claridad ante todo. El papel en las prácticas de raleo del manzano de hecho está escrito claramente en la etiqueta de Hascon S57, un fertilizante líquido de Greenhas caracterizado por una alta pureza. Único en su género, Hascon S57 combina la acción del tiosulfato de amonio y el tiosulfato de potasio. Finalmente, además de contener un alto nivel de nitrógeno, potasio y azufre, también está enriquecido con boro, hierro y zinc.
Gracias a la interacción de sus componentes, adecuadamente equilibrada, Hascon S57 favorece la acción de los raleadores químicos que se utilicen a posteriori. De hecho, la formulación actúa únicamente sobre las flores abiertas, mientras que las flores aún cerradas o las que ya han sido fecundadas no sufren ninguna acción por la aplicación.
El tiosulfato de amonio y el tiosulfato de potasio, presentes en una sola formulación, confieren a Hascon S57 altas propiedades higroscópicas, gracias a las cuales absorbe agua del ambiente y de los tejidos alrededor de la microgota. Después de la aplicación, los pistilos y el polen se secan debido a un efecto osmótico y, en consecuencia, el óvulo no puede ser fertilizado. Por la misma razón, también se inhibe el crecimiento del tubo polínico.
Hascon S57: recomendaciones de empleo
Hascon S57 es efectivo en todas las variedades de manzano disponibles actualmente, aunque con diferente intensidad dependiendo de las especificaciones genéticas. Su uso en variedades como Fuji, Red Delicious y Braeburn es indispensable.
Las condiciones necesarias para el uso de Hascon S57 son que las plantas estén secas, libres de rocío. Además, las temperaturas de uso deben estar entre 18 y 22 °C, con pronósticos meteorológicos que no reporten precipitaciones en los días inmediatamente posteriores a la aplicación del producto.
Una primera intervención, la más importante, debe colocarse al comienzo de la caída de los pétalos de las flores centrales, presentes en troncos viejos, mientras que la segunda intervención debe realizarse después de 2-3 días, para completar la acción de Hascon S57 en las flores sobre las ramas jóvenes, que generalmente se abren más tarde.
En cuanto a las dosis, Hascon S57 se utiliza entre 1,6 y 1,9 kg/hl, repartiéndolo a través de 1.000-1.300 litros de agua por hectárea sin añadir ningún agente hidratante ni adhesivo.
José Antonio Arcos