Ayer Coag abría las jornadas agrarias de EFA Campomar, en Aguadulce, para dar a conocer la nueva convocatoria de ayudas de incorporación de jóvenes agricultores y para explicar los motivos por los que mañana domingo 20 de marzo concurrirán en la capital del país miles de hombres y mujeres de la España rural en una macromanifestación que prevé reunir a más de 200.000 personas.
Antonio Moreno, secretario de organización de Coag-Almería, enumeraba a los estudiantes de la escuela familiar agraria las reivindicaciones específicas que su organización agraria llevará con acento almeriense hasta Madrid, en una protesta multitudinaria convocada por organizaciones agrarias, cooperativas, regantes y otros colectivos del mundo rural.
Marruecos y las importaciones de terceros
Uno de los puntos destacados es el de las importaciones de terceros países, particularmente Marruecos. “Los cupos en tomate no se cumplen, los precios de entrada no se cumplen y las tasas que se deberían pagar por ello tampoco se están pagando”, describía Antonio Moreno.
Desde Coag se defiende la paralización de los acuerdos comerciales con terceros “para que la agricultura no siga siendo moneda de cambio”, o en su defecto, que los acuerdos ya firmados, como el de Marruecos, que se cumplan según lo estipulado, aspecto que no sucede en la práctica ya que ni se respetan contingentes o cupos ni precios mínimos de entrada ni tasas arancelarias.
El representante de la Coag recordó también que no hay reciprocidad y que las importaciones de terceros países no cumplen las mismas exigencias laborales ni fitosanitarias que las producciones europeas, y por ello reiteró la importancia de garantizar la trazabilidad de los productos para evitar que las alertas sanitarias de terceros puedan perjudicar, por falta de trazabilidad, a los agricultores españoles.
Precios y ley de la cadena
Otra cuestión defendida por la Coag es la puesta en marcha de los nuevos mecanismos que incorpora la ley de la cadena agroalimentaria para evitar las prácticas abusivas. Moreno habló de sancionar dichas prácticas, de contratos transparentes para impedirlas o de la creación de un Observatorio de Precios para no vender por debajo de costes.
En el ojo de la diana, por ejemplo los descuentos de los supermercados, prácticas que la Coag critica porque se sitúan las frutas y hortalizas como artículos reclamo, “pero el que pierde es el agricultor, no el supermercado” porque la oferta la paga el productor.
Aumento incontrolado de costes de producción
Otro punto de la tabla reivindicativa es el de una tarifa eléctrica especial para el sector agrario, crucial para las comunidades de regantes. “Por ejemplo, un pozo que hace unos meses pagaba 15.000 euros mensuales, ahora ha subido el gasto hasta los 60.000 euros. Inasumible”, añadía Moreno.
Una escalada de costes visible también con la reforma laboral. La temporalidad y estacionalidad del sector agrario no se ha tenido en cuenta, no reconociéndose dicha excepcionalidad del sector y obligando a hacer fijos trabajos que solo son estacionales. Consecuencia de ello, un incremento más de costes.
Moreno señalaba que desde la Coag se piden deducciones fiscales para corregir dicha escalada de costes de producción.
Otros puntos descritos por Antonio Moreno fueron la extensión de norma para habilitar la retirada de segundas en períodos de crisis de precios; la legalización administrativa de pozos de riego sin derechos reconocidos por la Administración y que llevan años siendo utilizados. Sobre el agua además la necesidad de los terciarios para poder usar el agua de las depuradoras y la ampliación de desaladoras que se han quedado pequeñas, como la de Balerma; o a nivel de sanidad vegetal, la necesidad de los agricultores de poder contar con nuevas herramientas dada la limitación de materias activas que hace que muchas veces el productor no disponga de soluciones suficientes.
Nueva convocatoria de ayudas para jóvenes agricultores
En un escenario como el de la Escuela Familiar Agraria de Aguadulce – EFA Campomar – donde se forman muchos de los que harán posible el relevo generacional almeriense, la siguiente charla corrió a cargo de Erica Rodríguez, técnica responsable de programas de incorporación de jóvenes agricultores de Coag-Almería.
Rodríguez explicó que hay una nueva convocatoria de ayudas, con un montante total en Andalucía de 80 millones de euros, y cuyo plazo de solicitudes ha sido ampliado hasta mediados del próximo mes de abril.
Erica Rodríguez describió los requisitos que son necesarios cumplir para aquellos candidatos de entre 18 y 41 años que deben presentar un plan empresarial para los próximos cinco años. Se trata de una convocatoria, por concurrencia competitiva, con un mínimo de ayudas para los beneficiados de 40.000 euros y un máximo de 90.000 euros.
De hecho uno de los requisitos es la capacitación profesional, siendo un paradigma de formación agraria la EFA Campomar. Por su parte la Coag es una de las entidades colaboradoras de este programa de ayudas de incorporación a la actividad agraria con técnicos, como Erica Rodríguez, que asesoran y ayudan a los jóvenes que quieren acceder a dichas ayudas.
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