La revolución de la zeolita en la agricultura

De la mano de la almeriense Lupión y Rodríguez que tiene la distribución en España de la zeolita procesada por la portuguesa Zeocel. Un mineral, venido de Cuba, que puede significar un salto cualitativo hacia una fertilización más sostenible ya que estamos ante un “producto único”, según se concluyó en la presentación realizada este miércoles ante un grupo de agricultores en Berja (Almería), reunidos por este almacén de suministros asentado en La Mojonera.

Lupión y Rodríguez nació hace más de 30 años y con el paso del tiempo se ha especializado en nutrición vegetal y mejora de suelos. En esa línea de mejora, acondicionamiento y fertilidad del suelo se centró Manoli Joya, miembro del equipo técnico de Lupión y Rodríguez, que en su exposición presentó la Celtonita, que es la marca del fertilizante ecológico resultante de la zeolita procesada.

¿Qué es la celtonita?

Es un producto mineral tecnológico obtenido de un aluminosilicato natural, rico en macro y micro nutrientes. Es un fertilizante natural para una agricultura ecológica que previene sustancialmente la contaminación de las aguas superficiales y subterráneas. Es destacable su aporte continuado de nutrientes (cationes).

Propiedades de la celtonita

Intercambio iónico. La celtonita tiene la capacidad de intercambiar determinados cationes por otros. CIC de 150 a 170 meq/100 g haciendo que los nutrientes estén disponibles a través de intercambio iónico que se realiza sin que exista lixiviación o volatilización de los nutrientes.

Absorción/entrega de agua. Capacidad de absorber y entregar agua reversiblemente sin ningún cambio en su estructura. La celtonita puede absorber hasta un 40% de su peso en agua.

Absorción de gases. Absorbe selectivamente moléculas específicas de gases. Tiene una alta afinidad con el amonio.

La celtonita se puede aplicar en el semillero o en el propio invernadero en el momento del trasplante. En el primer caso se mezcla la celtonita con la turba habitual para el relleno de las bandejas de siembra. Las ventajas son las siguientes. Aumento del sistema radicular; desarrollo de la planta con mayor masa seca, compacta; adelanto para el trasplante (entre una semana y diez días según cultivo y fecha); sin necesidad de fertilización, abastece la planta durante su desarrollo inicial hasta el momento del trasplante todos los nutrientes necesarios. En cuanto a la aplicación de la celtonita en la finca, en el momento de la siembra, hay que aportar la celtonita en el hoyo de trasplante en contacto directo con la tierra y a continuación tapar con arena.

Efectos positivos

La aplicación de celtonita al inicio del cultivo minimiza el estrés post-trasplante y aporta homogeneidad en el desarrollo del cultivo.

Importante también la precocidad en la producción, lo que puede adelantar hasta diez días el corte de un pimiento o permitir introducir la colmena una semana antes en un cultivo de melón, por poner algunos ejemplos.

La celtonita ayuda a un desarrollo radicular mayor, mejorando la aireación y oxigenación del suelo y disminuyendo la compactación del sustrato.

Finalmente un efecto muy positivo es el de reserva, a modo de una batería – valga el paralelismo con un automóvil – ya que aporta nutrientes a la planta durante todo el ciclo. La celtonita retiene, evita la pérdida de nutrientes por lavado en el momento de riego con una retención que quintuplica la de los mejores suelos.

Recuperación de la masa verde de Sierra de Gádor

Todas estas propiedades descritas justifican que el próximo día 8 de marzo se haya programado una actividad de repoblación de bosque en la Sierra de Gádor con celtonita. Una solución nutritiva que por sus características de absorción de agua la hacen ideal para la recuperación de masa verde en zonas semiáridas como el Poniente almeriense.

Esta jornada de Lupión y Rodríguez desarrollada ayer en Berja contó además con una segunda charla sobre el cultivo de caracoles en invernadero, información que será desarrollada en un posterior artículo.