El gran mercado central de Barcelona y provincia está de conmemoración, ya que celebra 30 años desde que en 1988 decidiese cambiar su horario, pasando de nocturno a diurno, lo que le ha permitido abrirse a la exportación, rasgo identitario y diferenciador de este mercado mayorista.
Mercabarna, a través de su Asociación Gremial de Empresarios Mayoristas de Frutas y Hortalizas (AGEM), nos ha reunido hoy viernes en sus instalaciones de la zona Franca de Barcelona, junto a un grupo de blogger catalanes especializados en gastronomía, para conocer sus nuevos proyectos, hacer balance de los números que han convertido a Mercabarna en el mayor mercado central del continente e inaugurar nuevas actividades de promoción en la ciudad con las que incentivar el consumo de frutas y verduras.
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Una nueva y enriquecedora experiencia, ya que ha sido la primera vez que Ana y yo hemos recorrido Mercabarna y varias de sus 7 naves, que alojan a 152 empresas y 442 puntos de venta sobre un total de 170.000 metros cuadrados dedicados a las frutas y hortalizas. Sin contar la Zona de Actividades Complementarias, ZAC, que aglutina a medio centenar de compañías más sobre una superficie aún mayor en la que se llevan a cabo otro tipo de actividades auxiliares.
Mercabarna con sus 1.800 puestos de trabajo directos y otros tantos miles indirectos es una ciudad en sí misma, siendo las frutas y hortalizas su gran pilar con más de 1,5 millones de toneladas comercializadas al año, sin restarle importancia a su mercado de pescado o sus zonas cárnicas.
Mercado de otoño
Desde la asociación gremial AGEM se pretende acercar Mercabarna a la ciudadanía, ya que “los mercados centrales en España son los grandes desconocidos y queremos trabajar en su difusión”, nos ha apuntado Jaume Flores, presidente del gremio AGEM.
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Por su parte, Pere Prats, vicepresidente de AGEM, ha narrado algunas acciones promocionales como las visitas de escolares a Mercabarna y la participación en las campañas de “5 al Día”.
Hoy viernes los visitantes éramos blogueros. Durante la visita por las naves hemos podido ver todo tipo de frescos. De temporada – como castañas, boniatos, calabazas, membrillos, caquis, granadas, chirimoyas o mangos – hasta frutas de contraestación, como melón de Brasil, todo tipo de hortícolas, hojas o brásicas hasta incluso flores comestibles en el mosaico más amplio imaginado.
En la nave G nos ha saludado Jordi Arenas, un productor del Maresme al que nos ha hecho especial ilusión conocer en persona porque nos ha confesado que nos sigue desde hace años. Jordi cultiva en el Maresme al aire libre guisantes, los populares calçots y otros hortícolas, pero también en invernadero. Bajo abrigo, tomate.
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En la nave F hemos hecho parada en el puesto de Prats Fruits donde Pere Prats nos ha mostrado sus peras de altura, cultivadas en la comarca de Somontano en Huesca sobre una superficie de 42 hectáreas. En la misma comarca oscense dicha empresa tiene además producción de almendros y ya en Barcelona cultiva en ecológico olivar arbequina.
Y así hemos ido parando en diversos puestos como Frutas y Hortalizas Flores, grupo Frutasa, Gavà Grup (tomate Monterosa), Pañella Fruits, Cultivar o Laumont, entre otros. Detrás de todos ellos seguro que hay apasionantes historias que ya tendremos ocasión de ir relatando en nuestro Agro Auténtico!
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Boniatos, trufas y setas
La jornada en Mercabarna también ha contado con dos breves charlas sobre productos que están experimentando un interesante auge, bien por sus valores nutricionales o por sus posibilidades en la nueva cocina.
Ramón Barri, especialista en tubérculos, ha defendido las bondades del boniato, versátil y con mucho juego ya sea en snack como chips o preparados como cremas y que está aupando su demanda a lo largo de todo el año. No en vano en Mercabarna ya hay boniato los doce meses. Según Barri, el uso en dietas infantiles es especialmente destacable por su equilibrada aportación entre proteínas y calorías.
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Por su parte, Josep María Serentill, uno de los mayores expertos en setos y trufas ha explicado cómo está calando la llamada ‘cultura de la seta’. “El consumo va bien”, ha ilustrado el responsable de la firma Laumont.
Serentill ha referido segmentos como el de las setas deshidratadas y las congeladas y ha defendido que hoy día hay garantía de seguridad alimentaria en las importaciones de las setas frescas.
Capítulo trufas. Las blancas o de Italia han bajado su producción de origen transalpino, incrementándose en zonas como los Balcanes. Y en España hay que hablar de la trufa negra – áreas geográficas como Cataluña, Teruel, Guadalajara o zonas de montaña en Granada – que este año podría alcanzar las 80 toneladas y en un horizonte de pocos años el centenar.
María Espín, restaurante Brau de Sant Cugat y Top Chef
La presentación ha culminado con una degustación de recetas exclusivas con ingredientes de temporada a cargo de la chef María Espín. Unos chips de membrillo, sorprendente textura en un snack alternativo a las clásicas patatas; bombón de chirimoya, un toque muy dulce con el sabor de esta fruta tan característica de la costa tropical en municipios como Motril; el típico ‘mel i mató’ catalán (mil y requesón) rematado con setas y castañas; y un refrescante gin-tonic de Granada.
Esta actividad de promoción de los frutos de temporada tendrá continuidad en el mercado de otoño que se celebrará en el Carmel. Una degustación popular de cremas otoñales tradicionales, como calabaza, castaña, boniato y setas. Lo contaremos.
Ana Rubio