Nunhems se ha convertido en la pata de semillas de la multinacional BASF. Una de las noticias más comentadas en los últimos meses en la Aldea Global del mundo agro. La transición a esta compañía desde su anterior propietaria, Bayer, ha sido tranquila. Éste es el mensaje que ha querido transmitir la enseña durante su participación esta semana en Fruit Attraction 2018.
Bajo mensajes como “Siempre Nunhems, siempre contigo” el expositor de esta firma obtentora de semillas hortícolas ha querido comunicar al público profesional cercanía y certidumbre. Siguen siendo los mismos haciendo lo mismo, pero ahora bajo el paraguas de BASF.
En un segundo plano las novedades en variedades y conceptos, asunto prioritario en cualquier otra edición de Fruit Attraction, pero que esta ocasión – aún siendo sobresaliente – ha sido menos estratégico. Lo primero ha sido explicar a sus clientes que nada cambia.
Sandías minis
Nunhems siempre ha sido una firma muy ligada al cultivo de sandía, en el que sigue ahondando. En este caso con el lanzamiento de sandía Hiromi se da un paso más, ya que se trata de una mini con microsemillas, pensada para el monocultivo, con un calibre de entre 1,5 y 2,5 kilos y que tiene como rasgo muy interesante para el productor su gran precocidad, que la lleva a ciclos de 70 días.
Pero hay más en sandía. Kisy es una sandía que en su formato de piel negra pesa entre 700 y 900 gramos, y en rayada de 600 a 900 gr. Es una sandía pensada para coctelería y otros usos imaginativos en la cocina.
Lechugas, alcachofas y snaking
En hoja Nunhems ha llevado a Madrid un trío. Un mismo taco en multileaf que, como bien se observa en la imagen adjunta, está formado por viando, triple rojo y verde oscuro.
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Nunhems además apuesta por las alcachofas híbridas que mejoran en vigor y en resistencias a hongos de suelo.
Finalmente el concepto snacking visible en zanahorias que se comen como golosinas, pero también en pepino bajo la marca minigustos, pepinos snack que se producen en Almería y en la costa de Granada.
Ana Rubio