Parece una cifra menor, pero esas 3,5 hectáreas de media tienen una elevada productividad por metro cuadrado, debido a su tecnificación. Son datos oficiales de la Wageningen Economic Research hechos públicos este jueves en Almería en el transcurso de la tradicional jornada que cada año desarrolla en la capital almeriense la Embajada de los Países Bajos.
El área actual dedicada a invernaderos en Holanda está por encima de las 9.000 hectáreas, una superficie que ha ido cayendo desde el año 2000, de una manera leve pero continua. El número de explotaciones además ha ido decreciendo en la misma proporción que ha aumentado la superficie media, ya que los invernaderos de los productores que han dejado la actividad – sobre todo a partir de 2007 con el inicio de la crisis económica – han sido adquiridos paulatinamente por otros agricultores que han engordado su dimensión. De este modo la media de la explotación agrícola holandesa se sitúa en las 3,5 hectáreas.
De esas 9.000 hectáreas de invernaderos de cristal la mitad se destinan a flores y ornamentales y la otra mitad a frutas y hortalizas, es decir, una superficie seis veces inferior a la almeriense.
Claves de futuro de la agricultura holandesa
Marc Ruijs, investigador del Wageningen Economic Research, enumeró los retos de futuro de la agricultura de su país. Uno de los principales, referido a la energía, es reducir drásticamente el uso de combustibles fósiles y las emisiones de CO2. Reto con fecha inicial 2020, pero que se ha pospuesto a 2050 por la complejidad que supone tan compleja tarea. En este escenario energético el aliado dejó de ser la cogeneración para convertirse ahora la geotermia en el compañero de viaje del sector neerlandés.
En cuanto a agua y nutrientes, Holanda se plantea eliminar las pérdidas por drenajes y nutrientes de la hidroponía al subsuelo y evitar las filtraciones de agua no tratada.
En protección de cultivos también se prevé una reducción de químicos, más usados en flores que en hortícolas. El control biológico – y su capacidad de resiliencia – seguirá siendo un firme aliado para control de plagas y enfermedades.