El proyecto LIFE Blue Natura inicia una campaña de muestreo a bordo del buque oceanográfico “García del Cid”
Más de 30 tripulantes, 15 de ellos investigadores de distintos centros de investigación internacionales, participan en el proyecto para determinar el carbono retenido bajo las praderas marinas de Andalucía
Durante el mes de octubre se va a desarrollar la segunda campaña de muestreo del “Carbono azul” de los fondos marinos de Almería, Granada y Málaga. Son unos trabajos clave para conocer el stock de carbono almacenado en las praderas de fanerógamas marinas (carbono azul), que resultan imprescindibles para alcanzar los objetivos del proyecto LIFE Blue Natura, que coordina la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía (CMAOT) y en el que participan además UICN-Med, CSIC- Blanes, Hombre y Territorio, la Agencia de Medio Ambiente y Agua y la Fundación Cepsa como socio co-financiador.
La Consejería trabaja desde hace años en la conservación de las praderas de Posidonia oceánica en Andalucía. La mayoría de estos trabajos se han llevado a cabo en la provincia de Almería, ya que es la provincia andaluza que alberga la mayor parte de la superficie ocupada por este hábitat. Los trabajos que se han llevado a cabo en estos años también han puesto en valor y dado a conocer a la ciudadanía el papel que desempeñan estos valiosos ecosistemas, la joya del mediterráneo, en proteger nuestras costas frente a la erosión, en conseguir que podamos disfrutar de aguas cristalinas o como “guarderías” de especies de interés pesquero.
Estos ecosistemas marinos desempeñan un importante papel en las estrategias frente a la mitigación del Cambio Climático. El proyecto LIFE Blue Natura, coordinado por la CMAOT, y con aproximadamente 2.500.000 de euros de presupuesto (60 % cofinanciación UE), tiene como uno de sus objetivos principales calcular el carbono que se encuentra secuestrado bajo esta increíble planta desde hace cientos o miles de años, y que permanecerá sellado bajo ella mientras esta se mantenga en buen estado de conservación.
Cada año las praderas de Posidonia oceánica capturan toneladas de CO2 que finalmente se incorporan a la mata, en el suelo bajo la planta, formando un sumidero de Carbono azul, un “almacén natural”. Estos valiosos ecosistemas marinos, consiguen evitar de esta manera que se incremente la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera y todas las consecuencias negativas que este fenómeno acarrea, como el incremento global de la temperatura en el planeta.
El Delegado Territorial, Antonio Martínez, ha señalado que los muestreos que comienzan esta semana en Almería, son una pieza clave del proyecto, pues la toma de muestras y su posterior análisis van a permitir conocer cuántas toneladas de carbono hay “almacenadas” bajo las praderas de Posidonia oceánica en los fondos marinos de Almería, Granada y Málaga.
La tarea no es fácil y para ello el proyecto cuenta como socios con uno de los más reconocidos grupos de investigación a nivel internacional en la materia: el grupo de Investigación de Ecología de Macrófitos (GAME, Group of Aquatic Macrophyte Ecology) del Centro de Estudios Avanzados de Blanes, (CEAB-CSIC).
Coordinado por el Doctor Miguel A. Mateo, director del grupo de investigación y responsable de la campaña, el Buque Oceanográfico García del Cid, recorrerá las costas Almerienses con casi 30 personas en su tripulación, 15 de ellos investigadores de distintos centros de investigación. Todo el equipo trabajará durante esta semana y la siguiente en la toma de “testigos” o muestras del perfil del suelo, a lo largo de la costa. Gracias a la presencia del buque , será posible extraer muestras del sedimento bajo la pradera de hasta casi 6 metros de largo, alcanzando profundidades con materiales que pueden tener miles de años de antigüedad.
El equipo del CEAB-CSIC, cuenta con el el apoyo de los técnicos de medio marino de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en las tres provincias, para la selección de las mejores localidades y zonas para llevar a cabo el trabajo con todas las garantías.
Todo el material recogido en estos muestreos viajará hasta el laboratorio del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CSIC), donde en función de los análisis que haya que realizar (carbono orgánico e inorgánico, Isótopos de C y N, dataciones de carbono y con 210Pb, etc.) se enviarán a diferentes laboratorios especializados
Los resultados de estos trabajos estarán disponibles a lo largo de 2018 y con ellos, cuantificados los depósitos de carbono y su evolución, se podrá realiza una valoración económica del carbono azul de Andalucía y conseguir financiar la conservación de estos hábitats sumidero de Carbono azul, a través de estrategias para la compensación de emisiones