Hace un par de meses nos escribían desde Italia para preguntarnos por el virus Nueva Delhi en calabacín. Una empresaria agrícola italiana quería información al respecto, ya que la susodicha virosis había llegado hasta sus tierras y no sabían cómo combatirla. Sin embargo, por desgracia y habida cuenta de lo que sucedido en los últimos días en la vecina Italia, los productores hortícolas se han encontrado con un enemigo mucho peor que el virus, me refiero al frío.
Italia, principalmente las regiones del sur y también las islas, están sufriendo los efectos de un frente polar que está diezmando sus campos y todos sus cultivos, casi sin excepción.
Las imágenes corresponden a una zona agrícola situada al sur de Roma. Cultivos de calabacín que ya no temen al ToLCNDV (Tomato leaf curl New Delhi virus), sino a las heladas. En este caso el invernadero no ha sido refugio suficiente para resistir el azote del cielo.
Escribíamos ayer sobre las consecuencias que el frío está causando en las pizarras agrícolas del sureste peninsular español, subiendo los precios de todas nuestras hortalizas. Hoy vemos en cambio otros efectos de la meteorología, totalmente negativos, sobre nuestros vecinos italianos con los que nos solidarizamos.
En Italia han sido afectados los cultivos de invernadero, por supuesto los hortícolas de aire libre, las brásicas, los frutales y los cítricos. Posiblemente los productores españoles de fresa, de alcachofa, de kiwi o de naranjas/clementinas verán un repunte de sus cotizaciones próximamente. No en vano, en Italia todos estos cultivos han sido gravemente castigados.