Las organizaciones COAG y ASAJA se han mostrado contrarios al informe presentado del abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) sobre la sentencia que declaró nulo el acuerdo comercial UE-Marruecos.
COAG ya ha denunciado que el acuerdo vulnera la legislación europea sobre comercialización de frutas y hortalizas al limitar la capacidad de los consumidores para discernir si un producto etiquetado como originario de Marruecos procede de este Reino, o bien procede del Sáhara Occidental
ASAJA recuerda que este informe no es vinculante pero sí tiene bastante peso en la decisión final que pueda tomar el Tribunal Europeo.
Para ASAJA este informe sigue la línea mantenida por la Comisión, que recordemos presentó un recurso a esta sentencia con la intención de tumbarla, por lo que este posicionamiento viene a apuntalar esta intención. Así creemos que este informe es intencionado y está promovido por lobbies económicos favorables a los poderes económicos alauitas. Recordemos la presión ejercida por Marruecos, que suspendió contactos y relaciones institucionales, por lo que esta acción diplomática puede dar como resultado que la denuncia del Frente Polisario quede finalmente en nada.
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) considera que el informe de conclusiones presentado hoy por el abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE), Melchior Wathelet, sobre la sentencia que declaró nulo el acuerdo comercial UE-Marruecos confirman la “chapuza jurídica” en la que está sustentado
En las mismas, Wathelet considera que el Sáhara Occidental no forma parte de Marruecos y que por tanto, ni el Acuerdo de Asociación UE-Marruecos ni el acuerdo comercial aprobado en 2012 le son aplicables. Sin embargo, las producciones del Sáhara, caso del tomate, se tuvieron en cuenta a la hora de negociar contingentes y condiciones de entrada que recoge el acuerdo de libre comercio en cuestión. De hecho, en la actualidad entran productos agrícolas del Sáhara Occidental bajo las condiciones del mismo.
“Nosotros hemos defendido la aplicación de esta sentencia, y si los terrenos del Sáhara occidental tienen que ser excluidas del Acuerdo se debe abrir un nuevo marco de negociación en la que esta vez cuestiones como los precios de entrada, la trazabilidad sanitaria y fitosanitaria cobren un mayor peso y tengan verdaderas garantías”, señala Francisco Vargas, Presidente de ASAJA-Almería y responsable nacional del sector hortícola.
Además, tal y como denunció COAG en noviembre de 2012, el Acuerdo de libre comercio agrícola UE-Marruecos vulnera, a su vez, la legislación europea sobre comercialización de frutas y hortalizas frescas al limitar la capacidad de los consumidores para discernir claramente si un producto etiquetado como originario de Marruecos procede de este Reino, o bien procede del Sahara Occidental. La legislación europea de frutas y hortalizas establece que los productos destinados a ser vendidos frescos al consumidor solo podrán comercializarse si en ellos figura la indicación del país de origen. “Las conclusiones presentadas hoy tambalean los fundamentos del acuerdo por lo que exigimos su inmediata suspensión”, ha subrayado Andrés Góngora.
José Antonio Arcos
La mayoría de hortalizas de Marruecos son de empresarios de España, los traen los envasan y les ponen «origen España».