Una alumna de la Escuela de Arte diseña el logotipo para las rosquillas de Alhama. La Junta de Andalucía, a través de Andalucía Emprende, organizó un concurso para decidir la imagen de este producto que aspira a la declaración de IGP.
Lidia Cosmina Magurean, alumna del Ciclo de Gráfica Publicitaria de la Escuela de Arte de Almería, ha resultado ganadora del concurso convocado por Andalucía Emprende- entidad adscrita a la Consejería de Economía y Conocimiento- para decidir la imagen de marca y logotipo para la rosquilla de Alhama, un producto que aspira a conseguir la Indicación Geográfica Protegida (IGP).
El logotipo era presentado esta semana en la Escuela de Arte por el delegado territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Miguel Ángel Tortosa López; el alcalde de Alhama de Almería, Cristóbal Rodríguez López; el presidente de la Asociación de Panaderos ‘Rosquilla de Alhama’, Francisco López López; y el director de la Escuela de Arte, Juan Ramón Muley.
El diseño de Lidia Cosmina Magurean, que representa a un personaje inspirado en la rosquilla alhameña, resultó elegido en la tarde de ayer entre los 45 trabajos presentados por 33 participantes, todos alumnos y alumnas de la Escuela de Arte del Ciclo de Gráfica Publicitaria, tras la deliberación del jurado formado por el alcalde de Alhama de Almería, el director provincial de Andalucía Emprende, Juan José Bonilla; la directora del Departamento de Diseño Gráfico de la Escuela de Arte, Sol Úbeda; el presidente de la asociación de panaderos y Aurelio M. Muñoz, técnico del CADE de Alhama.
El jurado ha decidido conceder dos accesit a Raúl Álvarez Robles y Rosa María Chacón Gil. La ganadora ha obtenido un premio de 200 euros para canjear por material de diseño gráfico, concedidos por el Ayuntamiento alhameño, además del reconocimiento que supone que su diseño sea la imagen representativa de las Rosquillas de Alhama de Almería en los envases y las campañas de promoción.
Según ha manifestado el delegado de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, esta iniciativa pretende “impulsar la rosquilla de Alhama como producto de calidad diferenciado, saludable, con historia y arraigo en el territorio, dentro del proceso para alcanzar la IGP” y ha recordado el trabajo que viene realizando el CADE de Alhama de Almería “desde hace un año en estrecha colaboración con la asociación de panaderos del municipio para lograr esta figura de protección que reconoce y certifica la calidad y seguridad alimentaria de los productos que la ostentan y que puede generar un interesante efecto tractor sobre la economía de la comarca, que necesita estímulos para generar empleo”.
Asimismo, ha agradecido a todos las personas y entidades que han hecho posible el concurso y felicitado a los participantes, destacando “el alto nivel de los trabajos presentados y la profesionalidad y buen hacer de estos jóvenes estudiantes de la Escuela de Arte que pronto van a acceder al mercado laboral”.
El alcalde de Alhama de Almería, por su parte, ha agradecido a la Junta de Andalucía por el apoyo, a través del CADE de Alhama, para que “la rosquilla, la embajadora más importante de nuestro municipio, tenga su imagen de marca”, así como a la Escuela de Arte, sus profesores y alumnos por la buena disposición para participar en el concurso y a la asociación de panaderos, de los que ha destacado sus esfuerzos por unirse para ser más fuertes”.
El presidente de la Asociación de Panaderos ‘Rosquilla de Alhama’, constituida por cinco empresas, ha destacado “el valor añadido que dará la imagen diseñada por Lidia Cosmina a la rosquilla como producto de calidad, diferenciado y con el toque del saber hacer artesanal de nuestros ancestros”.
Por su parte, el director de la Escuela de Artes ha destacado la alta participación del alumnado del centro en el concurso, “una actividad altamente motivadora para todos que ha aumentado su porfolio” y la importancia que éste da al diseño como elemento de innovación no tecnológica en su currículo formativo.
Según ha explicado la ganadora del concurso, su diseño consiste en una mascota con forma de rosquilla, “de carácter alegre, en postura que indica seguridad y firmeza para señalar que el producto es bueno y de confianza. Los colores predominantes son el negro, por su elegancia, y el marrón, relacionado con el cuerpo, para transmitir bienestar físico y seriedad. En conjunto, la propuesta transmite las distintas partes de las empresas: la seriedad con la que se trabaja para dar lo mejor y conseguir el bienestar del comprador y, por otro lado, crear un ambiente familiar y sacar alguna sonrisa a los clientes”.
Ana Rubio