El screening es un proceso que realizan las casas de semillas en fincas comerciales de agricultores. Suelen ser tres años en los que se van segregando los materiales hasta que finalmente queda una variedad comercial, a lo sumo dos o incluso es posible que después del último screening no resulté ninguna variedad comercial.
La casa almeriense Agrinature realizaba ayer una novedosa jornada en la quería hacer partícipe de su screening de melón piel de sapo a los propios agricultores, técnicos de comercializadoras y almacenes de suministros, compradores, comerciales e incluso cortadores de melón.
“Que sean los propios profesionales del sector los que nos digan qué materiales de los que ensayamos gustan más”, explicaba Antonio López Montoro, breeder de melón de esta firma almeriense.
En torno a cada variedad cribada los asistentes podían rellenar un breve cuestionario respondiendo a cuestiones relativas a producción, calibre y forma, peso unitario medio o grados brix.
“Tenemos aquí más de 200 variedades, media docena de plantas por número, lo que buscamos es que sean los propios profesionales los que marquen lo que les gusta”, describía Miguel Ángel Barrios, técnico comercial de Agrinature.
Una finca de screening situada en La Cañada de Almería, junto a otra que Agrinature tiene de sandía. Esta casa comercial posee materiales de melón amarillo, pero aún no ha lanzado al mercado ningún piel de sapo. El primero saldrá de la explotación agrícola de las imágenes.