El cultivo de arándano está en auge en diferentes zonas del mundo, como Estados Unidos o Canadá. En España es Huelva su principal zona productora, lo que explica que fuese el lugar escogido por el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Andalucía Occidental para celebrar esta semana las II Jornadas Técnicas del Cultivo del Arándano. En este evento desarrollado en Moguer ha estado presente un lector habitual de este blog, Francisco Javier González, técnico de la empresa EcoCulture, una firma almeriense dedicada a la fisiología vegetal.
“En primer lugar habló el gerente de Freshuelva, Rafael Domínguez, que expuso la evolución del cultivo del arándano en la provincia onubense, haciendo hincapié en el problema del agua, pues el recurso no es suficiente y es un mal que está ocurriendo en todo el mundo”, comentaba Francisco Javier González, especialmente sensible con la cuestión hídrica, al ser miembro de la asociación ‘Agricultura Viva en Acción’.
La superficie de arándanos se duplica en Huelva
En el año 2013 había en Huelva 1.000 hectáreas de arándanos y en la actualidad hay 1.995 ha. En dos años se ha duplicado, y las áreas más importantes son Almonte con 567 hectáreas, Moguer con 250 ha., Lucena con 215 ha., Lepe con 125 ha. y Bonares con 130 hectáreas.
El pasado año España produjo 30.249 toneladas de arándanos, 20.055 de ellas onubenses, lo que significa que el 66% de la producción se focaliza en esta provincia andaluza.
Los países a los que más se exporta son UK ( Reino Unido ) con 9.749 toneladas seguido de Alemania ,Países Bajos y Francia. “Hay un gran interés en introducirlos en los países escandinavos y mantener el flujo en UK por ser un mercado muy interesante”, explica Javi González, “el gran resurgimiento de esta fruta está en la cantidad de antioxidantes que tiene y la conciencia que existe de que es una comida saludable y anticancerígena”.
Superficies a nivel mundial
El doctor ingeniero y profesor de la Universidad de Valparaíso en Chile, Gonzalo Allendes, a través de AGQ dio unas pinceladas de la nutrición en varios países sudamericanos. También aportó algunos datos de superficie. Por ejemplo, en Estados Unidos hay 44.634 hectáreas dedicadas a estas berries, en Chile son 15.000 hectáreas, 14.000 ha. en Canadá y la misma cifra en China, en Argentina son 3.000 hectáreas y un millar en Perú.
“Importante la calidad de firmeza y el dulzor porque al ser una fruta ácida hay que abonar para hacerla más dulce. Prioridad a tener en cuenta es la calidad de la planta, que esté sana , que tenga 5 brazos bien formados y un palmo de raíces que no tengan doblez porque se producen cuellos en las raíces y con el tiempo la raíz sufre una atrofia que impide que muchos elemento no los pueda tomar como es el caso del Fe”, describía este técnico de EcoCulture, “por ello, la clorosis férrica está muy latente en este cultivo y por más que apliquemos hierro no va a funcionar porque se produce una deficiencia de clorosis férrica inducida el Fe+2 no se metaboliza aunque tengamos en el suelo 150 ppm, raíces con nódulos, suelos pobres en materia orgánica y compactos por los limos, hay falta de oxígeno, y las raíces no pueden crecer, a parte de la acumulación de fosfatos, y cloruro sódico o potásico debido a la mala calidad del agua y una fertilización abundante, por lo que el equilibrio en CE es muy importante así como el ph del suelo que debe de estar en un 5,5, por debajo tenemos deficiencia de manganeso y aluminio, también va a depender de la variedad, el suelo, el agua, el clima, porque muy poca CE tendremos mala calidad de fruto y mucha CE tendremos poca producción”.
“En Perú los problemas que tiene en sus suelos son por alta CE, por el clima que es muy árido y en Colombia son suelos con poca CE porque llueve mucho, suelos ácidos y con mucha materia orgánica”, añadía Javier.
Eso sí, en dichos países del cono sur americano el arándano deja elevados márgenes. El productor rentabiliza muy bien dicho cultivo en 20$/kilo en Perú y 18-12$ en Chile.
Secretismo en torno al subsector del arándano
“Este sector está muy oculto para todos los técnicos, agricultores y empresas, nadie quiere saber lo que hacen los demás y las variedades que emplean porque existe un secretismo de no decir nada no vayan a que los copien y sea su ruina; cuando debe de haber más compañerismo, unión y menos secretos porque así el sector no avanza y vamos al individualismo y mala competencia que nos retrasa en avanzar más”, señala Francisco Javier González.
En esta jornada técnica se abordaron variedades de frío y poco frío, refiriéndose a las más utilizadas, que son las de origen estadounidense.
“El IFAPA está desarrollando variedades vegetales”, finaliza González, “tanto Luis Miranda como Charo Marín nos hablaron de los avances en sus programas y de la dificultad para elaborar una variedad con las características que queremos: frutos con mayor sabor, más producción, más rápidos en recolectar, etc”.
Ana Rubio
Me encanto gracias por compartir Jose Antonio , me resutló interesante