Casualidad o no, conozco a varios agrónomos titulados que tienen como hobby el cultivo de especies vegetales autóctonas, muchas en peligro de extinción, si se me permite esta última expresión. Y cuando empiezan a hablar entre ellos de lo que se siente al ver crecer un tomate oriundo de Almería, pero que las cooperativas desde hace décadas ya no cultivan, o una calabaza con tal o cual peculiaridad que yo no soy capaz de atisbar, la verdad es que me siento como un espectador ávido de aprender en mitad de una convención de sabios. Lo cierto es que es tanta la pasión que despierta esto de la recuperación y conservación de las semillas locales, por lo menos entre algunos técnicos de campo, que me he decidido a publicar algunas de las fotos que me ha cedido mi amigo Jorge, junto a algunos de sus comentarios. Jorge es uno de esos enamorados empedernidos.
«La primera fotografía es una muestra de la variabilidad existente de maíz. Aquí en España se cultiva tan solo el amarillo, algo el rojo, el de palomitas y el negro en la parte de Galicia«, describe Jorge, «en la segunda foto aparece el maíz blanco de los Andes, se puede apreciar el grosor de la mazorca o elote comparado con las otras… los granos rosados son porque se ha mezclado con otros maíces de tono rosado. Muchas de estas variedades las cultivan pueblos indígenas de México, Perú, etc. que mantienen sus variedades tradicionales«.
Todo lo que aquí aparece lo cultiva Jorge en su propio invernadero, en El Ejido (Almería, España). Las calabazas son también objeto de su cuidado. «En la primera foto se pueden ver las famosas calabazas del peregrino. Ideales para llevar agua cuando no había botellas de plástico como las de hoy en día. Son ligeras y resistentes. Y de diversos tamaños«, explica este ingeniero agrónomo, «la última imagen es una muestra de calabazas de distintos tipos. Las de la derecha de piel verde son las calabazas de cabello de ángel, de las que se saca el ingrediente para la pastelería. La de la izquierda marrón es una calabaza de comer. Y finalmente, la naranjita que aparece en el centro es la famosa calabaza de Halloween, una de ellas puse en mi casa este pasado día de difuntos«.
The hobby of the experts: growing native seeds. Part I
Coincidence or not, I know several graduate agronomists whose hobby is growing native plant species, many endangered ones, if I may use the last expression. And when they start to talk among themselves of what you feel watching how a tomato native of Almeria grows, but that cooperatives for decades do not grow it anymore, or a pumpkin with this or that peculiarity that I am not able to discern, the truth is that I feel like a spectator eager to learn in the middle of a sages’ convention. The truth is that such is the passion that this recovery and conservation of the local seeds awakes, at least among some field technicians, that I decided to publish some of the photos that my friend Jorge have given to me, along with some of their comments. Jorge is one of those inveterate lovers.
«The first picture is a sample of the existing variability of corn. Here in Spain it is grown only yellow, some red, the one for popcorn, and the black one on the part of Galicia,» describes George, «in the second picture appears the Andes white corn, you can see the thickness of the ear of corn or sweet corn compared to the other… the pink beads are because it is mixed with other pink corns. Many of these varieties are cultivated by indigenous peoples of Mexico, Peru, etc. which maintain their traditional varieties. «
Everything what appears here is grown by Jorge in his own greenhouse in El Ejido (Almeria, Spain). Pumpkins are also under his care. «In the first picture you can see the famous pilgrim pumpkins. Ideal to carry water when there were no plastic bottles like those of today. They are light and resistant. And have different sizes,» says this agronomist engineer, «the last image is a display of pumpkins of different types. The ones on the right are green-skinned pumpkin for candied spaghetti squash, from which is derived the ingredient for bakery. The left brown is a pumpkin to eat. And finally, the little orange that appears in the center is the famous Halloween pumpkin, I put one of them in my house this last Day of the Dead.»
Enorabuena, felicito ha aquellas personas que salvan de la extincion semillas, plantas de nuestro patrimonio, del pasado parara el mañana nadie sabe lo importante que seran en el futuro.
Creo que como hobby esta muy bien, seria muy importante de asegurar que no se puedan perder, en bancos de germoplasma o rentabilizando su cultivo.
Saludos.
Muy bueno el articulo sobre la conservacion de semillas autoctonas ya que tener un banco de semillas da una gran diversidad genetica de la cual se pueden obtener mas que esos frutos de antaño y que muchos añoramos, esta variedad nos ayudan a defendernos de plagas y fisiopatias.
Lo malo es que politica y capitalismo no entienden que las personas puedan beneficiarse de recursos naturales libremente ya que hace poco leia por estos lares que europa y no se convencidos por quienes que se iba a regular o legislar el uso de semillas autoctonas. Señores que nos qieren cobrar por semillas que nuestros antepasados se fueron pasando de unps a ptros y mejorandolas ellos mismo,pero hasta donde vamos a llegar, que falta que nos cobren por tener placas solares de autoconsumo jjjjj pues si estan planteando como cobrar por ello jjj pero eso es otro tema.
Mientras no se hagan michurinistas 😉