Hace pocos días nos reunimos un grupo de amigos para celebrar el cumpleaños de Olalla en su cortijo de Laujar, en la Alpujarra almeriense (Andalucía, España). Curiosamente, la mayoría de los allí presentes teníamos algún tipo de vínculo con la agricultura, o bien profesional o familiar. No recuerdo cómo, pero hubo un momento en el que la conversión se centró en las diferencias existentes entre las zonas de producción del Poniente almeriense y las del campo de Níjar. Y como compartíamos mesa representantes de ambas comarcas, pudimos mantener un debate más que entretenido con algunas conclusiones enriquecedoras. La principal de ellas es la que expongo a continuación.
Si tuviéramos que hacer un símil, la comarca del Poniente (el lugar de la Unión Europea con mayor concentración de invernaderos), alrededor de 20.000 hectáreas invernadas, sería la vieja Europa; mientras que el campo de Níjar (casi 6.000 hectáreas) sería Estados Unidos, en la época del viejo oeste, en el que se conquistó el país de este a oeste, poblando los colonos nuevas tierras – grandes superficies de terreno – que eran puestas en producción. Es más o menos la premisa que defendió José Ángel Suárez, ingeniero industrial e hijo de agricultores, y que finalmente compartimos el resto de presentes una vez que nos convenció.
El Poniente fue la zona pionera en la apuesta por la agricultura intensiva bajo plástico, allá por los últimos años de la década de los 60. El modelo era familiar, compuesto por pequeños agricultores y por explotaciones reducidas, siempre inferiores a una hectárea. Hoy día el modelo sigue siendo familiar, mayoritariamente, aunque la superficie media ha subido a las dos hectáreas. Algunos de los que prosperaron en el Poniente dieron el salto años después al campo de Níjar, donde las tierras eran más baratas y donde estaba todo por hacer. Estos colonos del Poniente reprodujeron el modelo en la comarca del Levante; pero con otras características. Ya no se trataba de pequeñas explotaciones, sino de fincas bastante más grandes, incluso algunas superan las diez hectáreas. Jesús, María del Mar, José Ángel, Antonio, Ramón, Víctor o yo mismo empezamos a nombrar a agricultores del Poniente que conocemos, que habían dado ese paso, hace ya años, cambiando incluso su residencia y asentándose en la villa que inspiró en su día al poeta García Lorca.
Abderitanos en Níjar, ejidenses, roqueteros, dalienses, virgitanos, vicarios o mojoneros. En la lista de agricultores que se marcharon de Europa (el Poniente) a Estados Unidos (Níjar) hay de todos los pueblos del Poniente almeriense. Son gente emprendedora, trabajadora y también ambiciosa. Ese carácter se observa incluso en su modo de comercialización: en Níjar hay cooperativas y subastas, hasta ahí de acuerdo; pero las Sociedades Agrarias de Transformación (S.A.T.) y las Sociedades Limitadas (S.L.) tienen un peso muy significativo, ¿quién no conoce grupos de media docena de agricultores, con un número importante de hectáreas, que han creado su propia empresa y venden directamente sin intermediarios? Fenómeno muy, muy nijareño.
The West like the old Europe and the field of Nijar like The United States. The conquest, from east to west
A few days ago a group of friends met to celebrate the birthday of Olalla in her farmhouse in Laujar, in La Alpujarra of Almeria (Andalusia, Spain). Curiously most of those present people had some link with agriculture, either professional or family one. I do not remember how, but there was a moment when the conversion focused on the differences between production areas in the West of Almeria and in the field of Nijar. And as there were at the table representatives of both regions, we could have a debate more than entertained with some enriching conclusions. The most important one is what I will explain below.
If we were to make a comparison, the region of the West (the place of the European Union with the highest concentration of greenhouses), around 20,000 wintered hectares, would be the old Europe, while the field of Nijar (almost 6,000 hectares) would be the United States, at the time of the Old Western, when the country was conquered from east to west, and settlers populated new land – large areas of land – that were put into production. It’s more or less the premise that defended Jose Angel Suarez, industrial engineer and son of farmers, and that eventually the rest of us shared once that he convinced us.
The West was the pioneer area in betting on intensive agriculture under plastic, back in the last years of the 60’s. The model was familiar, composed of small farmers and small farms, always with less than one hectare. Today the model is still family, mostly, although the average size of the surface has gone up to two hectares. Some who flourished in the West made the leap some years later to the field of Nijar, where land was cheaper and where nothing had been done yet. These settlers of the West replicated the model in the region of the East, but with other features. They were not small farms any more, but rather larger farms, including some which exceed ten hectares. Jesus, Maria del Mar, Jose Angel, Antonio, Ramón, Víctor or myself started to name farmers from the West that we know, who had taken that step some years ago, even changing their residence and settling in the town that inspired in other times the poet Garcia Lorca.
People from Adra in Nijar, from El Ejido, Roquetas de Mar, Dalías, Berga, Vicar o La Mojonera. In the list of farmers who left Europe (the West) to the U.S. (Nijar) there are people from all the villages of the West of Almeria. They are people enterprising, hardworking and also ambitious. That character is observed even in their way of commercializing: in Nijar there are cooperatives and auctions, we agree up to here, but the Agricultural Transformation Societies (SAT) and the Limited Partnerships (SL) have a significant importance, who does not know groups with half a dozen of farmers, with a significant number of hectares, that have created their own company and sell directly without intermediaries? A phenomenon very, very typical of Nijar.
Hola jose antonio, reconozco que es un buen símil, pero las diferencias son grandes, tamaño de explotaciones, (se vende una finca de 2 has en el poniente y compraba 10 en el levante). Hasta aquí bien, pero y el agua?, mas cara y mas mala, y la mano de obra? Mas en tomate que ej pimiento, y la temperatura,? Mejor y mas cálida en los inviernos del poniente. Estos sencillos factores hacen que no siempre halla sido un éxito la expansión del poniente al levante almeriense.
Saludos cordiales y como.siempre enhorabuena por tu blog.
JE
El cambio de x hect. por x+? es coreccto pero la red de servicios para la administracion y mantenimiento de la explotacion es muyyyyy distante del poniente al levante, aunque ese inconveniente se le va dando alguna solucion poco a poco. Lo que si me parece una fuente de INFORMACION en la zona del levante es todo lo relaccionado con el agua porque aunque el liquido subtraido de subsuelo no reuna todas las condiciones que son necesarias esta la aportacion de la desaladora de Carboneras que realizando la mezcla corespondiente con el agua de cada pozo obtenemos una sustancia ideal para la nutricion vegetal. Digo esto porque en el poniente tendremos una desaladora en el futuro y hay una paguina completa de interrogantes sobre el agua obtenida y sus condiciones para la distribucion y uttilizacion.